'¿Un verdadero gran Campeón?', por Mauricio Gallardo

Los grandes campeones asestan golpes contundentes a sus rivales, en la misma medida con la que potencian sus recursos, llevando todo a otro nivel y muchos se preguntan si Jonathan Rea puede ser uno de ellos.

Habitualmente cuando un deportista se corona un año tras otro, es probable que cada una de esas conquistas tenga un sabor especial y también suele ser difícil igualar la emoción de la primera vez.

Pero como nunca hay un guión igual, cuando Rea repase en retrospectiva su campaña, encontrará en su última consagración como Campeón del Mundo de World Superbike muchos aspectos que harán de ese logro un hecho trascendental.

Acaso el aspecto de que se haya convertido en el piloto con más títulos en la historial de la serie, sea mucho más que eso. Luego de alcanzar a Carl Fogarty con sus cuatro coronas, el norirlandés las logró de manera consecutiva, tuvo la posibilidad de sumar una más y ser así el hombre más laureado.

El quinto título llegó de manera casi inesperada, tras una batalla técnica, deportiva y mental sin precedentes en sus temporadas anteriores.

La llegada de Álvaro Bautista y el estreno de la Panigale V4 R puso en jaque su reinado, ya de esto hemos escrito mucho, y el hombre de Kawasaki hizo todo lo que tuvo a su alcance y más, para revertir su posición y finalmente cantar victoria con un desahogo que no le conocíamos.

Jonathan Rea, Kawasaki Racing Team celebra su quinto título mundial

Photo by: Gold and Goose / LAT Images

Lo concreto es que los distintos son aquellos que nunca se dan por vencidos, los que no se sienten satisfechos y siempre quieren ir por más objetivos.

Rea no solo fue el mejor en esta temporada 2019 sino que pudo evolucionar como piloto, potenciando lo que ya tenía, maximizando cada uno de sus aspectos positivos.

Lo de Johnny es una muestra cabal de que en el deporte es difícil escribir sentencias antes de tiempo y su tesón junto al team Kawasaki armó tal descalabro, que hasta se rompió la unión entre Bautista y Ducati. Lo que prometía ser una dupla llamada al éxito, terminó abruptamente con la salida del talaverano hacia Honda para 2020.

Rea ha demostrado que no tiene que mostrarle nada a nadie y ante la falta de oportunidades para llegar a MotoGP, se concentró en su lugar y en ser mejor de lo que era, un piloto completo desde todos los puntos de vista y con un techo que aún no aparece.

Sus rivales redoblarán esfuerzos y recursos para intentar batirlo el próximo año. Saben que tendrán que contar con el mejor paquete posible para intentar bajarlo y ni aún así tendrán garantías de conseguirlo. Eso es justamente lo que logran los grandes campeones, no solo movilizan internamente a sus estructuras sino que también sacuden el campo rival como una gran onda expansiva.

Por todo ello es posible pensar que Jonathan Rea es uno de esos grandes campeones y también que dará a su quinto título mundial, un lugar más que especial.

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