FIA sanciona a Ogier por el choque con un coche privado en Croacia

El siete veces campeón Sébastien Ogier no sólo terminó la primera aparición del Rally de Croacia en el calendario del WRC con una memorable victoria y el liderato de la clasificación de pilotos del WRC, sino también con dos multas de la FIA y una prohibición suspendida.

La causa de este castigo sobre el francés fue el accidente de tráfico cuando se dirigía a la etapa inicial de la última jornada.

Según el informe del equipo Toyota a los comisarios, Ogier y su copiloto Julien Ingrassia se dieron cuenta de que había un problema con su Toyota Yaris WRC mientras conducían por la autovía por lo que intentaron estacionarse en una parada de autobús. En ese momento fueron golpeados por un BMW que intentaba adelantarles.

Ogier intercambió detalles con el conductor del BMW y, con la autorización de los organizadores del rally y de un miembro del equipo en el lugar, creyó que eran libres para continuar su recorrido a la ruta, pero una patrulla de la policía de tráfico intervino.

El campeón del mundo fue filmado apartando a los policías de su camino y marchándose en contra de los deseos de las autoridades por lo que fue multado con 5,000 euros y se le impuso una suspensión de un evento.

Además de esta infracción, Ogier también se saltó un semáforo en rojo, por lo que fue multado con 2.000 euros adicionales.

Este fue el documento oficial de la FIA sobre el incidente de Ogier de tráfico y con la policía. 

"El piloto, el Sr. Ogier, explicó que después de salir del parque de asistencia, se dieron cuenta de que tenían que detenerse para revisar algo en el coche. Después de salir del semáforo en rojo, vieron una parada de autobús a la derecha y cambiaron de carril para llegar hasta ella y pararse ahí".

"Otro coche se acercaba rápidamente por detrás en el mismo carril y al mismo tiempo y chocó contra el lado derecho del #1 del Sr. Ogier. Inmediatamente después del accidente, el Sr. Ogier se detuvo al lado de la carretera para comprobar que nadie resultó herido y compartió su información de contacto con el otro conductor".

"Cuando la policía llegó al lugar del accidente, no hablaban inglés, y se le pidió a un miembro del equipo que se ocupara de los papeles. Una vez que el Sr. Lehtinen llegó a la escena, hubo una conversación telefónica entre el cuartel general de la carrera y un comisario de policía que estaba en el lugar del accidente. Parecía claro que podían continuar pero, según el Sr. Ogier, esa información no se compartió con el policía que estaba frente al coche".

"Como piloto y copiloto ya habían dado toda su información y un representante del equipo estaba ahí, el Sr. Ogier sintió que podía irse. El Sr. Ogier añadió que entiende completamente que eso no debería haber sucedido y que su comportamiento da una muy mala imagen dado que los vídeos se difundieron rápidamente en las redes sociales. El Sr. Ogier se disculpó por la ofensa y prometió contactar con el conductor del otro coche involucrado en el accidente, así como con el oficial de policía parado frente a él para disculparse con él también". 

"Los comisionados concluyeron que, como tal, un accidente de tráfico no constituye necesariamente una violación de las reglas. Sin embargo, no se puede aceptar el comportamiento del Sr. Ogier conduciendo obligando a echarse a un lado al policía. El Sr. Ogier provocó una situación peligrosa. El incidente va en detrimento de los intereses del automovilismo".