En 1966 hubo una contienda, una compañía y lo más importante, un coche que puso a los EEUU, por primera vez, en el escenario del automovilismo mundial. Después de que fallase el intento de comprar el imperio de Enzo Ferrari, Henry Ford II le declaró la guerra y nació Ford Total Performance. Leyendas del automovilismo como Carroll Shelby, Ken Miles, Bruce McLaren y Chris Amon aprovecharon la ocasión y encabezaron la campaña.

El resultado fue el nacimiento del icónico Ford GT Mark II. La batalla estaba fijada para las 24 Horas de Le Mans 1966, considerada una de las carreras más prestigiosas del mundo. Ferrari fue destronada cuando Ford dominó en la pista en lo que fue la primera victoria norteamericana en las 24 Horas de Le Mans.

El chasis P/1046, de Shelby-American pilotado por los neozelandeses Bruce McLaren y Chris Amon, ganó la prestigiosa carrera. El P1046 fue retirado de la competición poco después de ganar en Le Mans y pasó por gran cantidad de manos y restauraciones. En 2014, Robert Kauffman, propietario de RK Motors compró el coche y se convirtió en el propietario actual. El coche pasó por una extensiva restauración a manos de Rare Drive en New Hampshire.

En el 50 aniversario de de la histórica victoria, el chasis P/1046 estuvo en las 24 Horas de Le Mans de 2016, cuando Ford ganó de nuevo. La historia continúa en noviembre de 2019 con el estreno de la película “Le Mans 66” protagonizada por Matt Damos y Christian Bale.

Para celebrarlo, el chasis P/1046 se desplazó a Los Ángeles para la premiere de la película. Como si fuera una estrella, el icónico automóvil compartió la alfombra roja con los actores y técnicos de la película. El legado de una de las grandes historias del automovilismo, sigue vivo.

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