Rossi: “Cuando creé la academia, nunca pensé que podrían llegar a ganarme”

La idea de crear la VR46 Academy nació en 2013, cuando Valentino Rossi decidió poner orden en su MotorRanch y ayudar, más en serio, a los muchos pilotos italianos que visitaban su finca para prepararse como futuros campeones.

Entre ese grupo inicial de chicos estaba un joven Franco Morbidelli, que llegó a Tavullia en 2006 y fue de los primeros, y también otros jovencísimos pilotos persiguiendo un sueño, como Romano Fenati, Nicolò Bulega, Niccolò Antonelli, Lorenzo Baldassarri o Francesco Bagnaia.

Morbidelli debutó el pasado año en MotoGP tras proclamarse campeón de Moto2 en 2017, y Pecco Bagnaia ha seguido sus pasos, ganó la corona intermedia en 2018, precisamente con el equipo Sky VR46, y este curso ha dado el salto a MotoGP.

Después del test de Sepang, en el que Pecco acabó 2º con la Ducati y Franco 8º con la Yamaha, ambos por delante de Valentino (10º), los alumnos parecen dispuestos a plantar cara al maestro.

Tras concluir el test a Valentino le preguntaron por el impresionante segundo mejor tiempo del debutante Bagnaia.

“Me parece genial, es impresionante, en la vuelta rápida ha estado fantástico, mi enhorabuena”, dijo Rossi, antes de añadir entre risas: “espero que en ritmo sea un poco más lento”.

Tras ser el primer campeón de la historia del equipo Sky VR46, Bagnaia llega como piloto del Pramac, pero con contrato con Ducati, donde confían ciegamente en el joven italiano, unas expectativas que Valentino comparte.

“Siempre ha sido un piloto rápido y si ves el test ha marcado un 1.58.3, considerando la poca experiencia que tiene, es impresionante. Creo que vamos a tener que estar atentos con él, creo que me lo van a poner difícil”, dijo en relación a Pecco y Morbidelli.

“Creo que será difícil, porque el rendimiento mío y el de Franco ha sido muy similar (ambos van con Yamaha), y hoy mejoramos mucho. Y Pecco… tendré que trabajar más, va a ser difícil estar delante de ellos”.

Medio en broma y medio en serio, Valentino hablaba en Sepang de sus nuevos rivales, pero siempre con un tono de orgullo por ver como los frutos de la academia que creó hace unos años está empezando a dar los frutos perseguidos.

“Sí, por su puesto. Cuando comenzamos con el proyecto de la academia, con Pecco, con Franco, no esperábamos que llegarían a ponerme en aprietos, no esperaba que nuestros jóvenes pilotos llegarían a pelear conmigo (risas)”.

“Por un lado estoy preocupado, muy preocupado. Pero por otro lado, estamos muy contentos porque se demuestra que estamos haciendo un buen trabajo en la academia. Así son las cosas, ayudamos a corredores que quizá ahora pueden ganarme, pero ya no podemos dar marcha atrás”, agregó el italiano con una gran sonrisa de satisfacción en el rostro.

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