"Solo puedo intentar algo en la última curva", dice Quartararo

Buriram.- En un circuito en el que voló en 2019 con la M1 descatalogada del equipo satélite de Yamaha, Fabio Quartararo no pudo, este sábado, con la moto de este año, ser tan rápido a una vuelta y tuvo que conformarse con la cuarta posición de parrilla, por lo que tendrá que salir a carrera por detrás de las Ducati de Marco Bezzecchi, el sorprendente pollean, Jorge Martín y su máximo rival para el campeonato, el italiano Pecco Bagnaia, las tres máquinas italianas que coparon la primera fila de la parrilla.

Quartararo hizo la pole en 2019, la última vez que se corrió en este circuito, con un tiempo de 129.719, que hasta hoy se había mantenido como el récord absoluto de la pista. El francés, con la moto 2022, solo pudo girar este sábado en 1.29.909, casi dos décimas más lento, mientras que Bezzecchi, Bagnaia y Martín hasta en tres ocasiones, giraron por debajo de su marca.

"Fue muy duro. Creo que teníamos mucho potencial, mucho ritmo. En mi vuelta rápida lo di todo, pero estamos muy limitados por el motor", se lamentó el corredor francés, que con una moto claramente inferior se está defendiendo como un león al frente del campeonato.

"El agarre en 2019 era mucho mayor que ahora", justificó, en parte, las prestaciones de su Yamaha. "Nuestra moto es más rápida que la de entonces, pero los demás han ganado mucho", añadió.

Si no quiere perder puntos respecto a Bagnaia, Fabio deberá tratar de buscar un adelantamiento que, esta temporada, se le está poniendo complicado.

"El único punto en el que podré intentar algo es la última curva", dijo señalando al anguloso codo de derechas (curva 12) de entrada a la recta de meta, precisamente el punto que más se le atraganta a Marc Márquez, pero que las Ducati hacen como si fueran sobre raíles.

Sin embargo, Quartararo no quiere volverse loco ni tomar riesgos excesivos a solo cuatro carreras para cerrar el campeonato.

"Mantener mi posición en carrera estaría bien", en referencia a ese cuarto puesto en parrilla.