Michelin se endurece

Jerez de la Frontera.- Michelin siempre se había caracterizado por fabricar neumáticos muy específicos, pero eso se ha convertido en un problema dadas las circunstancias actuales del Mundial de MotoGP. Inicialmente, los pilotos disponían de dos carcasas distintas tanto para el neumático delantero como para el trasero, y cada una de ellas podía combinarse con dos o hasta tres mezclas distintas, más duras o más blandas. Pues bien, después del trajín de este arranque de campeonato, el suministrador ha decidido reducir su oferta y limitarla a una sola carcasa delante y a otra detrás.

La trasera ya quedó definida hace días, y las pruebas que se llevaron a cabo este lunes en Jerez fijaron ya la construcción que se empleará, al menos, en los próximos tres grandes premios (Le Mans, Italia y Montmeló). Será la más dura de las dos disponibles, identificada con el número 34.

“La información de la mañana del test ya nos ha hecho decidirnos por la 34”, explica a Motorsport.com Piero Taramasso, jefe técnico de Michelin. “Es la que la mayoría empleó en la carrera del domingo, la que casi todos utilizaron también en Austin, y la que el 90% llevó en Argentina”, añade.

Para el técnico, quitarse de encima esa segunda opción facilitará el poder centrarse en evolucionar la elegida, y así aumentar sus prestaciones. “Eran demasiadas especificaciones. Lo normal es que los equipos dispongan al menos de dos mezclas distintas. Si a eso le añades dos carcasas, el resultado son cuatro posibilidades”, desgrana el italiano, que para ilustrarlo mejor pone encima de la mesa el ejemplo de la próxima cita.

“En Le Mans nos podemos encontrar una temperatura de pista de 15 grados u otra de 45. De modo que desplazaremos tres mezclas para la goma delantera. Si dispusiéramos de dos carcasas, eso significaría seis posibilidades. Es demasiado”, relata Taramaso.

Posibilidad de reblandecer la trasera

El domingo pasado, la mayoría de corredores se quejó de falta de tracción de la goma trasera, consecuencia de la combinación de un asfalto con poca adherencia por culpa del calor, y de la rigidez de la carcasa del compuesto. “Aunque la carcasa será una en cualquier caso, aquello que no descartamos es introducir una un poco más blanda más adelante, pero ya con vistas al final de la temporada”, zanja el responsable de Michelin.