Tincknell terminó conforme con el papel de Chip Ganassi

Tincknell y sus copilotos, Tony Kanaan y Andy Priaulx, condujeron el Ford GT # 67 al cuarto lugar, un lugar detrás de sus compañeros,Sebastien Bourdais, Dirk Muller y Joey Hand, en el coche # 68.

Sin embargo, Tincknell dijo que estaba satisfecho de que él y el equipo habían dado todo lo que tenían para tratar de superar al dominante Porsche 911 RSR, que vio a Priaulx pasar brevemente por el segundo puesto de Frederic Makowiecki, y Bourdais entablar un amargo duelo con su compatriota del 911.

"Estoy realmente feliz", dijo Tincknell a Motorsport.com. "Di el máximo absoluto al igual que todo el equipo y el auto no perdió un solo golpe durante toda la carrera.

"La carrera disminuyó y fluyó y la suerte de los autos de seguridad y las zonas lentas vino y se fue, y en un momento parecía que estábamos desafiando para el segundo.

"Nadie quiere terminar cuarto porque obviamente quieres estar en el podio, pero estoy muy contento con el trabajo que hicimos y con el ritmo que teníamos". Las paradas fueron geniales, los cambios de los frenos fueron perfectos, y no puedo decir nada más sobre Ford. Y puntos para el campeonato, que obviamente es lo que necesitamos después de un comienzo accidentado en Spa ".

Cuando se le preguntó si había alguna manera de amenazar a la victoriosa pareja de Porsche, Tincknell sugirió que no.

"Andy hizo una gran pelea con el segundo Porsche", respondió, "e hizo un gran movimiento para pasarlo. Pero como viste en esa gran batalla con Seb, tienen tanto poder que creo que fue su carrera perder. Tan pronto como [3min] 47.5 entraron en la calificación, creo que todos sabíamos que la escritura estaba en la pared en términos de lo que nuestro coche podría lograr.

"Es por eso que estoy contento con el cuarto lugar. No podríamos haber hecho más y esta noche puedo irme a la cama sin remordimientos ".

Al preguntársele por qué su auto número 67 estaba a 1 minuto detrás de su coche hermano, Tincknell respondió: "Bueno, como dije, la carrera decayó y fluyó. Conseguimos un auto de seguridad muy bien sincronizado para ponernos detrás de ellos, pero el único problema que tuvimos fue que en una parada de emergencia solo tuvimos medio tanque de combustible, lo que nos impidió la estrategia, y así siempre estábamos luego en riesgo de tener suerte o mala suerte, y otro coche de seguridad llegó en el momento equivocado y nos dejó un minuto atrás.

"Pero el # 68 hizo un trabajo perfecto también. Tan tercero y cuarto detrás de los dos Porsches es todo lo que pudimos hacer.”