Sato gana en Portland y Celis en 17°

Alexander Rossi y Andretti Autosport tal vez dejaron escapar su única oportunidad de revertir la situación en el campeonato de pilotos de IndyCar 2018. El norteamericano tuvo el chance de revertir la clasificación cuando Scott Dixon, Ganassi, fue parte de un múltiple accidente en el arranque de la competencia, pero en cambio, ahora llegará al cierre en Sonoma con 29 puntos (598 vs 569) de desventaja contra el neozelandés.

Pero mientras el campeonato se mantiene abierto, Takuma Sato logró el triunfo en el regreso de IndyCar a Portland, acompañado en el podio por Ryan Hunter-Reay y Sébastien Bourdais.

En la contienda por el campeonato, Dixon rescató un valioso quinto puesto contra un octavo de Alexander Rossi. 

Los colombianos Carlos Muñoz y Gabby Chaves cruzaron la meta en el sitio 12 y 13 respectivamente, mientras que el mexicano Alfonso Celis cruzó la meta en la posición 17 con el equipo Juncos.

La primera vuelta resultó un caos cuando en la curva 2 se inició el drama con un contacto múltiple entre, Zach Veach, Sébastien Bourdais, Graham Rahal, Ed Jones, Marco Andretti, James Hinchcliffe y Scott Dixon. El hasta ese momento líder del campeonato logró regresar a la competencia, mientras Andretti giró con su # 98 por los aires, saliendo por su propio pie del monoplaza.

El accidente obligó a la salida del coche de seguridad durante las primeras seis vueltas de la carrera, mismas que algunos como el mexicano Alfonso Celis, Juncos, aprovecharon para ingresar a los pits.

La carrera reinició en la séptima vuelta y Alexander Rossi emergió como líder, un puesto que en ese momento le daba el primer sitio del campeonato de pilotos. Los colombianos Carlos Muñoz y Gabby Chaves saltaron a las 10 primeras posiciones.

El americano de Andretti Autosport solo perdió el primer sitio cuando ingresó para su primera parada de pits en el primer tercio de la carrera, cediendo la delantera a Ryan Hunter-Reay, quien perdió siete segundos respecto a Rossi cuando también fue a los boxes.

La primera ronda de detenciones trajo cambios importantes para los latinoamericanos. Muñoz avanzo hasta el octavo sitio mientras que Chaves descendió al 13, por detrás de Santino Ferrucci, 12°, y un sorprendente Tony Kanaan quien se recuperó desde la parte trasera para colocarse 11°.

La carrera entró en una nueva fase de bandera amarilla en la vuelta 42 cuando Will Power se salió del trazado provocando que sus neumáticos se quedaran sin la respectiva adherencia e impactara contra el muro de neumáticos situado previo a la recta principal.

Un cambio de secuencia en los pits permitió que Hunter-Reay emergiera como líder al momento de una nueva bandera verde, seguido por Takuma Sato y Sébastien Bourdais, cada uno de ellos con estrategias diferentes. Alexander Rossi descendió a la posición 14 al momento de cumplir su segunda parada en pits.

La carrera tuvo un tercer encadenamiento cuando Zach Veach, #26, sufrió una salida del circuito en la vuelta 56, reiniciando seis giros más tarde.

 Una cuarta bandera amarilla provocada por la detención en pista de Santino Ferrucci en la vuelta 75 dejó a Max Chilton en el lidesato, esto ante la entrada de pits de Takuma Sato y Sébastien Bourdais.

La carrera regresó a estado de bandera verde en el giro 82. Chilton apenas resistió tres vueltas fuera antes de ingresar a los pits dejando a Sato en el liderato seguido por Hunter-Reay, Boudais, Pigot y un sorprendente Scott Dixon, quien tras su accidente en el arranque ya era quinto. A su vez, Alexander Rossi se ubicaba 8°.

Los latinoamericanos también saltaron y los colombianos Gabby Chaves y Carlos Muñoz se situaron 12 y 13, mientras que Alfonso Celis alcanzó el sitio 17 en ese momento de la carrera.

Con 15 vueltas para la bandera de cuadros, Hunter-Reay comenzó el ataque sobre Sato por el liderato, detrás de ellos Bourdais manejaba en solitario en tercero mientras que Pigot defendió con 0.8 segundos su ventaja sobre Dixon en el cuarto sitio.

Hunter-Reay cerró la diferencia a menos de medio segundo en las últimas cuatro vueltas, pero sin poder hacer más.