Wolff no quiere que Hamilton sufra la desgracia de 2007

El jefe de Mercedes, Toto Wolff, señaló que aprendió una lección de la crisis de McLaren de fines de 2017, lo que significa que su equipo no puede relajarse y pensar que la batalla por el campeonato ha terminado.

En aquella temporada, McLaren tenía la posibilidad de ganar el campeonato con Lewis Hamilton o Fernando Alonso, pero una serie de incidentes permitieron que el finlandés Kimi Raikkonen conquistara el título, el último de pilotos para Ferrari.

Ahora, Lewis Hamilton tiene una ventaja de 67 puntos sobre Sebastian Vettel, esto tras una racha de cuatro victorias consecutivas, esto cuando restan cuatro carreras. Estos números le permiten tener la oportunidad de coronarse en Austin, siempre que Vettel no quede más adelante del tercer sitio, lo cual le daría al británico su quinto campeonato mundial.

Pero a pesar de la fuerte posición en la que se encuentra el equipo, Wolff teme que siempre exista la posibilidad de que ocurra algo inesperado, y cita 2007 como un ejemplo clásico.

En ese entonces, bajo la antigua estructura de puntos, Hamilton tenía una ventaja de 17 puntos sobre Kimi Raikkonen con solo dos carreras de la temporada por delante, lo que llevaba a que el inglés solo necesitara de un tercer sitio para asegurar la corona. Pero un choque en China y un problema de caja de cambios en Brasil, abrió la puerta para Raikkonen.

Hablando sobre el impacto de la ventaja considerable que Mercedes tiene en camino a la carrera de este fin de semana en Austin, Wolff dijo: "No cambia nada. En 2007, faltaban dos carreras, 45 puntos en los puntos de hoy, y [Lewis] perdió el campeonato. ¿Alguna vez alguien pensó que podrías perder 45 puntos en dos carreras? Era imposible”.

“Las carreras ocurren el domingo, y no necesariamente el auto más rápido gana. Tuvimos un momento en el verano en el que no éramos el auto más rápido y aún así conseguimos algunas victorias. No queremos quitar el pie del pedal porque no terminar una carrera, o un domingo raro, todo desaparece”.

Si bien Mercedes ha trabajado duro desde su derrota en el Gran Premio de Bélgica para asegurarse de que ha maximizado sus oportunidades, reconoce que es poco lo que puede hacer para evitar que se presenten circunstancias extrañas.

Wolff agregó: "Los incidentes anormales ocurren en todas partes y no terminar una carrera, y un consiguiente resultado negativo de repente, borran una gran parte de sus puntos. Sé que, desde un punto de vista de probabilidad, no podría suceder, pero esto es automovilismo, es un deporte, cualquier cosa puede pasar”.

“No quiero insistir demasiado en esto porque también es un mal karma, así que simplemente hay que salir a hacerlo. Vamos a Austin para tener un fin de semana de carrera, y luego, con suerte, sellaremos el campeonato”.

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