Vettel inicia una historia de amor con 'Gina'
Sebastian Vettel espera que después de la primera cita en Australia con Gina su relación llegue aún más lejos a lo largo de la temporada.
Foto de: LAT Images
Sebastian Vettel inició una nueva relación. Después de la primera cita parece que el amor fluye ente él y Gina y, aunque como en cada romance, tienen que trabajar para conservar la llama encendida, el primer beso resultó pasional.
No, no se trata de una súper modelo, sino de su nueva Ferrari, el SF70H, al que bautizó como Gina y con el cual espera llegar muy lejos en el campeonato mundial.
“Yo diría que para ser la primera vez fue fantástico”, dijo a la web oficial de la Fórmula 1 respecto al sentir sobre la primera carrera, Australia, que ambos disputaron juntos.
“Esperemos que este sea el comienzo de una gran historia de amor! (Risas) Hoy nos sentimos muy excepcionales, sobre todo después de la difícil temporada 2016, y un duro invierno en el que muchos de nosotros entrábamos en este coche. Las largas noches y el trabajo duro fueron finalmente recompensados”.
El cuatro veces campeón del mundo destacó que este resultado es la muestra del trabajo que se realizó en Maranello en los últimos meses pero también el sobrellevar la frustración del año pasado.
“Uno siempre intenta construir el mejor coche posible, a veces funciona, a veces no. Pero esta vez parece funcionar. Era importante que al equipo llegara la paz y que las nuevas ideas florecieran. En los últimos años Mercedes fue el punto de referencia; vamos a ver cómo será esta temporada”.
A diferencia de lo que muchos pensaron, Vettel no cree que su victoria en Melbourne únicamente se debiera a la errónea estrategia de Mercedes, por el contrario, destaca que Ferrari tuvo un gran mérito.
“Nosotros trabajamos duro para generar nuestra suerte”, expresó el alemán. “Yo sabía que él trataría de presionarme hacia el final de la carrera, así que estaba preparado para su contraataque, ¡pero nunca llegó! Dijo que se sentía incómodo con los neumáticos más blandos, ¡nosotros no! Y eso fue en definitiva la clave para controlar la carrera”.
“Absolutamente lo disfruté. Incluso logré obtener el ritmo para conseguir una brecha que se mantuvo constante. Era capaz de mirar a la izquierda, a la derecha y ver a los fans y sus banderas, pero, la bandera más dulce fue la cuadros”.
Resta esperar para saber si este amor florecerá.
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