Verstappen espera que en el simulador su motor no se rompa

Max Verstappen habló públicamente por primera vez desde su segundo retiro consecutivo cuando estaba en una posición para pelear por la victoria, tercer abandono de la temporada por razones técnicas, esto durante el programa de la televisión holandesa Peptalk.

En la transmisión explicó lo sucedido durante el Gran Premio de Azerbaiyán, donde él se retiró mientras su compañero Daniel Ricciardo logró la victoria.

“Durante la carrera no estaba pensando en problemas de confiabilidad, pero de repente tuve un nuevo problema”, dijo el piloto de Red Bull Racing en el show.

"Durante la carrera no estaba pensando en [problemas de confiabilidad] y de repente tuve un problema de nuevo", dijo. "Es realmente algo visceral caer de nuevo cuando estás en una posición tan buena y, en especial, cuando te fijas en todo lo que sucedió después”.

Verstappen destacó que por ahora no hay un diagnóstico definitivo sobre lo sucedido, pero hay algo claro: “definitivamente fue algo con el motor. El equipo sigue investigando el problema”.

“Este fue un problema de motor y, por desgracia, no la primera vez."

El holandés prefirió ver el aspecto positivo en toda su desgracia del fin de semana, primero empezando porque contará con una nueva unidad de potencia. “Ahora podemos poner un motor nuevo”.

Después, Verstappen destacó que está impulsado por el nivel de competitividad que Red Bull demostró en Bakú. “Creo que quedamos sorprendidos. El coche estaba trabajando bien, pero también quiero marcar puntos. Todo el año ha sido bastante bueno en términos de velocidad absoluta, pero en términos de conseguir puntos realmente no se han conseguido”.

“(El equipo) espera que haga lo mejor posible y espero que todo sea perfecto por parte Red Bull y del motor también. Es muy duro”.

Cuando se le preguntó al final de la entrevista cómo iba a dejar de lado su decepción, Verstappen bromeó: "El miércoles estaré en el simulador, al menos allí el motor no puede romperse”.

Sin hablar con los medios

Verstappen también explicó sus razones para no hablar con los medios de comunicación después de su cuarto abandono en ocho carreras de la presente temporada; esta situación le costó una multa de 25 mil euros.

"Realmente no me apetecía (hablar) en ese momento", dijo. "Me quedé en la pista media hora para hablar con mis ingenieros de la carrera y del equilibrio del coche y después me marché. Pensé que era la cosa más inteligente que podía hacer”.

Verstappen negó la especulación de una conspiración contra él desde dentro del equipo, y respondió: "Absolutamente no. Tenemos que fijarnos en lo duro que los chicos trabajan día y noche para hacer que el coche funcione a la perfección”.