Mercedes ya no "lucha por sobrevivir" con el problemático W13

Mercedes introdujo una serie de cambios para el Gran Premio de Gran Bretaña del pasado fin de semana con el objetivo de aprovechar los progresos que obtuvo con el primer paquete de desarrollo que colocó en España.

Aunque la escudería todavía no tiene el ritmo necesario para luchar con Red Bull y Ferrari en igualdad de condiciones, y claramente sigue teniendo problemas en los circuitos urbanos estrechos y con brincos, hay un creciente optimismo en su seno de que han dado la vuelta a los problemas que tenían.

En lugar de que Mercedes se concentre en eliminar los problemas de velocidad que han perjudicado a sus pilotos en la primera fase de la campaña, su mentalidad está cambiando hacia el rendimiento puro.

El director de ingeniería de Mercedes en pista, Andrew Shovlin, dijo: "En las primeras carreras, estábamos literalmente luchando por sobrevivir y los pilotos igual con un coche que era increíblemente difícil de manejar".

"Pero hicimos un trabajo decente para sumar puntos y aprovechamos las oportunidades cuando otros no eran fiables".

"Barcelona fue útil para nosotros porque teníamos algo que no estaba rebotando como sucedía en cada circuito al que íbamos. Pero está claro que la reciente carrera en tres circuitos urbanos ha puesto de manifiesto otro punto débil y, para ser sinceros, lo estamos revisando. Buscamos los problemas, y luego intentaremos aplicar nuestros conocimientos de ingeniería para resolverlos".

"Pero yo diría que la ruta que queremos seguir ahora está cada vez más clara. Y eso es alentador desde el punto de vista del desarrollo".

"Esta actualización [de Silverstone] es la primera en la línea que empezamos a crear en Barcelona".

Aunque gran parte de la atención sobre el desarrollo y el progreso de Mercedes se ha centrado en su concepto de carrocería con cero sidepods, el equipo se ha mostrado firme en que ese diseño ha tenido poco que ver con los problemas de principio de temporada.

En su lugar, el factor clave ha sido la gestión del flujo de aire por debajo y alrededor del suelo. Y en este sentido, su enfoque fue revisado de forma significativa en el Gran Premio de España, aunque los ajustes realizados no fueran tan evidentes.

"En cuanto al concepto del coche, hemos cambiado mucho desde la primera vez que corrió", dijo. "Se comporta de forma muy, muy diferente a cuando salió por primera vez en la pista. Aunque si se mira desde la distancia se parece bastante aerodinámicamente a lo que teníamos en la primera carrera, es una bestia bastante diferente ahora".

Preguntado por Motorsport.com si considera que el equipo tiene un nuevo concepto desde el lanzamiento, Shovlin dijo: "Creo que sí, en Barcelona cambiamos el concepto quizás en términos de la forma en que el coche funcionaba para tratar de resolver algunos de los problemas con los rebotes".

"Aunque nuestros problemas con los rebotes generaron mucho interés en las primeras carreras, porque estábamos en la peor parte del pelotón, si nos miras aquí (en Silverstone), creo que estamos realmente cerca de la mejor parte".

“No somos los mejores, pero estamos muy lejos de ser los peores. Así que creo que hemos progresado. Y lo que nos queda es un coche que es un poco más rígido de lo que nos gustaría. Pero sin duda es un coche con el que podemos empezar a trabajar".

Lo que parece ser el objetivo de Mercedes, y es algo que todos los equipos persiguen, es la capacidad de obtener la producir los máximos niveles de carga aerodinámica con una altura de conducción lo más alta posible con la nueva generación de coches. Ahora mismo, el W13 va demasiado bajo y con una suspensión demasiado rígida para cualquier cosa que no sea la pista más suave.

Shovlin añadió: "Desde el primer día con esta normativa, el reto siempre iba a ser generar carga aerodinámica a gran altura". 

"Parece que estamos corriendo poco, y esa es una de las cosas que nos gustaría desarrollar. Pero estamos progresando en esa dirección".