La columna de Vandoorne: Trabajo de equipo y rebufo para Alonso

En su nueva columna para Motorsport.com el piloto de McLaren destaca lo frustrante que fue ser sancionado en su debut como piloto local en Spa, y el trabajo de equipo dando rebufo a Alonso en la clasificación.

Stoffel Vandoorne, McLaren

Stoffel Vandoorne, McLaren

Andrew Hone / Motorsport Images

Fernando Alonso, McLaren, Stoffel Vandoorne, McLaren
Stoffel Vandoorne, McLaren MCL3
Stoffel Vandoorne, McLaren MCL32
Stoffel Vandoorne, McLaren MCL32, Marcus Ericsson, Sauber C36
Stoffel Vandoorne, McLaren MCL32
Stoffel Vandoorne, McLaren MCL32
Stoffel Vandoorne, McLaren MCL32
Stoffel Vandoorne, McLaren MCL32
Stoffel Vandoorne, McLaren MCL32
Stoffel Vandoorne, McLaren
Stoffel Vandoorne, McLaren MCL34
Stoffel Vandoorne, McLaren MCL32
Stoffel Vandoorne, McLaren MCL32, pit stop
Stoffel Vandoorne, McLaren MCL32
Stoffel Vandoorne, McLaren MCL32
Stoffel Vandoorne, McLaren e invitados

Poder pilotar ante mis fans de casa, mi familia y mis amigo me dio una gran motivación extra, un impulso anímico que ya noté cuando llegué al circuito.

También se había conocido la confirmación oficial de McLaren de que voy a seguir en el equipo en 2018. No era una gran sorpresa para mí, ya que tengo un contrato de varios años, pero era importante transmitir el mensaje y que el equipo lo anunciara.

Ahora podemos concentrarnos en la segunda mitad de la temporada y realmente prepararnos para el futuro, sabiendo que el equipo está 100 por cien convencido de mis capacidades.

Penalización en parrilla

Desafortunadamente el fin de semana de Spa no empezó con buenas noticias, ya que de entrada supe que iba a ser penalizado al cambiar la unidad de potencia mejorada por Honda.

Saber que iba a empezar desde la parte posterior de la parrilla significaba que cambiaba nuestro enfoque de todo el fin de semana. Íbamos a centrarnos en hacer salidas largas con el depósito lleno, sin preparar la clasificación que ya no era importante para nosotros.

Tuvimos un viernes razonable, con una buena puesta a punto del coche, que nos pareció bastante competitivo en tandas largas. Así que para nosotros fue un primer día de entrenamientos bastante razonable, teniendo en cuenta las largas rectas de la pista.

Trabajo extra para los mecánicos

El viernes por la noche tuvimos un golpe de efecto al descubrir el equipo durante una revisión algunos problemas en mi unidad de potencia. Como medida de precaución tuvimos que cambiar de nuevo el motor para el sábado.

Para el equipo fue una noche muy larga. Descubrieron el problema muy tarde, sobre la medianoche, por lo que tuvieron que romper el toque de queda e iniciar el proceso del cambio de motor.

Eso significó que los mecánicos tuvieron que trabajar hasta las tres de la madrugada, y dormir muy poco antes de regresar al paddock temprano por la mañana el sábado. Fue duro para todos, pero hicieron un buen trabajo porque todo funcionó. ¡Realmente le quiero agradecer el trabajo a todos ellos!

Hicimos un buen FP3 centrado de nuevo en largas tandas, en la clasificación acordamos hacer una estrategia especial para tratar de ayudar al equipo, lo que significó dar a Fernando Alonso un buen rebufo y sacrificar mis giros de clasificación.

Rebufo para Alonso

Para mi la clasificación no era importante porque iba a salir el último de todos modos, así que decidimos que trabajar con Fernando sería lo mejor para el equipo.

Eso también significaba, sin embargo, que la única manera que podía demostrar mi potencial era en la Q1, cuando hice una muy tanda rápida, logrando el décimo mejor tiempo en mi vuelta lanzada con el segundo ultrablando. Pero tan pronto como los dos coches entraron en la Q2 sabía que tenía que centrarme en ayudar a mi compañero de equipo.

Habíamos hablado mucho con Fernando y los ingenieros sobre la mejor forma de hacer ese trabajo, e hicimos unos buenos entrenamientos antes de la clasificación, y creo que al final funcionó perfectamente, aunque no pudo pasar a la Q3.

El domingo creo que mi carrera fue una de las mejores que he hecho este año. Fuimos fuertes en términos de trabajo, pero también fue muy frustrante empezar tan atrás, porque no había ninguna esperanza real de poder superar a los pilotos que teníamos delante.

Realmente nos faltaba velocidad punta, pero el chasis era muy competitivo en el sector medio, el más revirado.

Monza, todavía más difícil

Creo que el Gran Premio de Italia de este fin de semana también será difícil y, probablemente, una de las carreras más dura del año para nosotros.

Si vemos como estaba la situación en Spa, sólo hay que entender que Monza aún tiene más rectas y menos curvas para ganar tiempo. Espero un fin de semana muy duro para nosotros, aunque por el momento la climatología parece que va a ser variable, lo que podría ser bueno para nosotros.

Daré mi máximo como siempre y estaré preparado para aprovechar cualquier oportunidad que se presente. 

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