Reducen la cantidad de fans en Portimao por el coronavirus

Portugal será sede de su primera carrera de F1 desde 1996 este fin de semana después de que el circuito de Algarve fuera sumado al calendario recientemente en medio de la pandemia del coronavirus.

Los jefes de la pista esperaban recibir una multitud de alrededor de 50.000 personas en cada día del fin de semana, pero una nueva ola de restricciones por el COVID-19 fue anunciada en Portugal la semana pasada. Esto ha dado lugar a que Portimao recorte sus cifras de asistencia previstas para la carrera de este fin de semana, limitando el número de espectadores a 27.500 por día, según lo aprobado por el gobierno local.

46.000 entradas se habían puesto a la venta para la carrera, pero todas las que estaban en las áreas de admisión general que no tenían un asiento de tribuna designado han sido eliminadas.

"Como es bien sabido, Portugal vio aumentar las medidas para combatir la pandemia del COVID-19 la semana pasada, según lo determinado por el gobierno, con una serie de medidas restrictivas adicionales que entraron en vigor en el territorio nacional", dice un comunicado de la pista.

"Como consecuencia de estas nuevas medidas, las autoridades sanitarias y administrativas también han determinado nuevas limitaciones y prohibiciones en cuanto a la presencia del público en el Gran Premio de Portugal, a saber, una nueva disminución del número total de espectadores permitidos".

Portimao confirmó que ofrecería a los aficionados el reembolso total de las entradas si así lo solicitaban, y que estaba trabajando en "varias soluciones" para los que se encontraban en la zona de admisión general.

"Nos gustaría mucho que el momento actual fuera diferente, para que todo pudiera suceder de forma diferente, pero tenemos que adaptarnos a las situaciones, a medida que se nos presentan, y resolverlas dentro de las posibilidades a nuestro alcance", agregó el comunicado.

La semana pasada, el gobierno portugués puso un límite de cinco personas a las reuniones en espacios públicos, mientras que existe también el objetivo introducir una nueva legislación que haga obligatoria la utilización de máscaras en todos los espacios públicos.

Portugal reportó un nuevo récord de 2.608 casos de COVID-19 en un solo día la semana pasada, y ha reportado 100 muertes en la última semana.