La FIA no quiere dejar nada al azar con respecto a la emergencia del coronavirus. La epidemia de COVID-19 estaba de hecho en la agenda de la reunión del Consejo Mundial que se celebró hoy en ginebra.
El profesor Gerard Saillant, Presidente de la Comisión Médica de la FIA, hizo una presentación detallada de la situación actual y, por lo tanto, se decidió crear una unidad de crisis, que se reunirá cada dos días para examinar los últimos acontecimientos en todo el mundo respecto a la enfermedad.
La FIA seguirá vigilando de cerca la situación y todas las implicaciones, junto con los clubes y promotores, siguiendo el consejo de las autoridades pertinentes, incluidos los gobiernos y la Organización Mundial de la Salud.
La Federación Internacional también evaluará el calendario de las próximas competiciones, adoptando todas las medidas necesarias para proteger a la comunidad automovilística mundial y a su público, incluido el aplazamiento de ciertos eventos si fuera necesario, tal como ya ha sido con el caso del GP de China de Fórmula 1, o de los ePrix de Sanya y Roma en la Fórmula E.
Recuerda datos curiosos del GP de China a continuación...
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El primer GP de China fue la antítesis de una temporada dominada por Michael Schumacher. El alemán trompeó en la clasificación (en ese momento se disputaba a una sola vuelta) y salió último. En la carrera, se tocó con el austriaco Christian Klien, trompeó solo y acabó en una lejana 12ª posición. Para redimirse, logró la vuelta rápida de la carrera en el último intento...
Si el año anterior había sido malo, 2005 fue aún peor para Schumi. Yendo a la parrilla, se tocó con el Minardi del holandés Christjan Albers. El alemán se vio obligado salir desde boxes con el coche de repuesto. En la carrera, después de entrar el Safety Car, el pilotó dañó sus neumáticos cuando perdió el control de su coche y acabó en la grava. Game over.
Esta vez, la suerte le sonrió a Schumacher. Sobre mojado, Renault decidió cambiar los neumáticos intermedios de Alonso. La decisión resultó ser mala ya que, sin cambiarlos, Schumaher y Fisichella (compañero de Alonso en Renault) recuperaron una desventaja de 20 segundos en menos de diez vueltas. Fernando perdió la carrera ante Schumacher, que en ese momento se puso primero en el campeonato.
El guión parecía listo: saliendo desde la pole, Hamilton iba camino de ganar el título en su primer año en la F1. Pero, debido a una mala decisión con neumáticos intermedios, Lewis se vio atacado por Raikkonen. El finlandés le pasó y Hamilton intentó ir a boxes... pero se quedó enganchado en la puzolana de la entrada al pitlane. Allí, el británico comenzó a perder el título de ese año.
Si McLaren tuvo una de sus mejores carreras ese año con Hamilton, con el otro coche todo salió mal. Y se debió a un fallo garrafal del equipo: le pusieron a Heikki Kovalainen los neumáticos delanteros cambiados, el izquierdo en la derecha y viceversa. El piloto se quejó mucho del coche y terminó pinchando uno de los neumáticos delanteros antes de tener que abandonar.
Fue un día perfecto para Red Bull. El primer doblete del equipo llegó en la lluvia de Shanghai. Pero el trofeo al constructor fue diferente de los demás que se entregaron ese domingo, le faltaba el anillo del lado derecho. ¿Se rompió?
La imagen que quedó para la historia en aquella carrera sucedió en los primeros libres. Sebastien Buemi se acercaba a la horquilla cuando, al frenar, sus dos ruedas delanteras se desprendieron e hicieron que el suizo se convirtiera en un pasajero dentro de su coche. Según el equipo, las nuevas piezas de la suspensión delantera fueron la causa de un accidente, cuanto menos, extraño.
Presionado por Vettel durante el primer stint de la carrera, Button cometió un gran error al entrar en boxes: confundió el garaje de Red Bull con el de McLaren. El piloto perdió su posición ante el alemán después de tener que ir hasta donde le tocaba. Para colmo, el inglés perdió el podio en las últimas vueltas con el compañero de Vettel, Mark Webber, mientras que su propio compañero Hamilton logró su primera victoria del año.
Mercedes ganó su primera carrera como equipo desde 1955 en 2012, con Nico Rosberg. Pero podría haber sido incluso un doblete si no hubieran fallado en el pitstop de Schumacher, al que hicieron salir con una rueda sin ajustar. El heptacampeón fue el único que abandonó ese domingo.
Derrotado por Vettel en Malasia después de que el alemán desobedeciera la orden de no atacarla al final de la carrera, Webber comenzó la espiral de mala suerte que acabaría haciéndole retirarse. El piloto se quedó sin combustible en mitad de la Q2 y se vio obligado a salir desde boxes. Durante la carrera, golpeó a Vergne y rompió su alerón delantero. Eso le acarreó una sanción para la siguiente carrera, pero, antes de eso, entró en boxes y le colocaron mal un neumático, obligándole a abandonar.
La carrera había transcurrido normalmente hasta la penúltima vuelta. Fue entonces cuando un comisario desprevenido mostró la bandera a cuadros a Lewis Hamilton. Al inglés le pareció extraño y lo comentó con su equipo. Y de hecho finalmente, aunque la carrera era a 56 vueltas, el resultado se contó al final de la 54.
¿Alguna vez has imaginado que alguien se quejara porque el piloto de delante fuera demasiado lento? Eso es lo que le pasó a Nico Rosberg con Lewis Hamilton en 2015. Durante las primeras vueltas, el inglés rodaba razonablemente por debajo de su ritmo antes de las paradas. Rosberg, temeroso de gastar sus gomas detrás de su compañero, consideró que el comportamiento era injusto y se quejó en la conferencia de prensa.
La carrera de China 2016 fue el cuarto gran premio en la historia de la Fórmula 1 en el que todos los pilotos acababan sin abandonar. La temporada 2016 también vio la quinta carrera sin abandonos, en el GP de Japón.
Fichado por Mercedes como sustituto de Nico Rosberg, Valtteri Bottas estaba en su segunda carrera con el equipo cuando terminó sufriendo un gran revés en China. El finlandés sufrió la salida de un Safety Car después de ponerse neumáticos de pista seca, recordando a Schumacher en 2005. Al menos pudo remontar y acabar sexto.
Daniel Ricciardo experimentó una montaña rusa de sentimientos en el Gran Premio de China de 2018. El piloto tuvo un fallo de turbo en los terceros libres y apenas pudo salir a la clasificación debido a una reparación apresurada. Salió al final de la Q1 y logró clasificarse sexto. En la carrera, con suerte por un Safety Car, cambió neumáticos y superó a Verstappen, Hamilton, Vettel, Raikkonen y Bottas para ganar la carrera.
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