La norma que la FIA eliminó de la F1 en secreto

Nadie habló de ello. Al contrario, el cambio reglamentario fue escrito en una corrección técnica que la FIA emitió a los equipos y eso fue suficiente. Porque, frente a la supuesta transparencia de la que tanto alardea la F1, la "regla" se derogó en absoluto silencio.

¿De qué estamos hablando? De la abolición de la tristemente célebre Directiva Técnica 39 que tantas discusiones había suscitado el año pasado. El equipo de Nikolas Tombazis decidió suprimir la métrica con la que los comisarios técnicos controlaban las oscilaciones del chasis para cumplir la norma antiporpoising que había entrado en vigor en el GP de Bélgica en Spa-Francorchamps.

Desconocemos los motivos, pero es fácil predecir que para la Federación Internacional la introducción de las nuevas reglas aerodinámicas (elevación del bordillo inferior en 15 mm y del codo donde se eleva el difusor trasero en 10 mm) podría ser suficiente para controlar los saltos en las rectas, por lo que ha hecho bien en derogar un control que habría ocupado innecesariamente a los comisarios.

Según ha podido saber Motorsport.com, el algoritmo se anuló desde el inicio del campeonato 2023 después de que ya se flexibilizara en el Gran Premio de Singapur para evitar que algunos monoplazas sobrepasaran los límites de la norma debido a las fuertes oscilaciones que podían generarse no tanto por el porpoising como por la frecuente rugosidad del circuito urbano de Marina Bay.

La medida puede parecer correcta, pero llama la atención saber que la decisión se mantuvo en el más absoluto secreto, como si se tratara de información de clasificada. ¿Se imaginan lo que ocurriría en el fútbol si no se divulgaran públicamente las reglas del VAR para un incidente controvertido?

Las DT de la FIA son a todos los efectos extensiones del reglamento: no basta con descargarse el archivo del Reglamento Técnico 2023 de la web de la Federación Internacional para saber cuáles son las normas vigentes, porque hay apéndices que se quedan en la correspondencia entre la Federación Internacional y los equipos.

Como nota al margen, añadamos también que el porpoising aún no ha sido derrotado y los saltos del Ferrari SF-23, y no sólo eso, son una demostración plástica de ello, aunque se hayan disipado las alarmas de seguridad que habían inspirado la emisión de una medida muy discutida en Canadá, que luego entró en vigor en Bélgica, tras los saltos exagerados que se habían observado en Bakú, especialmente en el Mercedes.

De hecho, Mercedes había "sugerido" a la FIA un cambio de reglamento durante la temporada que los comisarios técnicos ratificaron después precisamente con el pretexto de la seguridad, única cláusula gracias a la cual la Federación Internacional puede intervenir sin el consentimiento unánime de los equipos.

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