Ferrari planea aumentar su presupuesto de F1 en 2019

Ferrari no ha ganado un título desde su campeonato de constructores en 2008, obtenido con Kimi Raikkonen, quien además fue el último piloto en reclamar el campeonato de pilotos un año antes.

Ferrari se separó de Maurizio Arrivabene antes del inicio de la temporada 2019 y nombró al ex director técnico Mattia Binotto como su nuevo director de equipo en un intento por finalmente vencer a Mercedes en la era turbo-híbrida V6.

"Si bien nuestro desempeño en la Fórmula 1 el año pasado fue el mejor desde que ganamos el campeonato de constructores en 2008, no cumplimos con nuestra ambición lograr el campeonato", dijo el presidente y CEO de Ferrari, Louis Camilleri, a los inversores en una conferencia telefónica la semana pasada.

"Nuestro objetivo de seguir adelante sigue siendo el mismo que siempre; ganar".

"En 2019 proyectamos un aumento en el gasto que refleja parcialmente esta ambición, pero también incluye los gastos de desarrollo requeridos para abordar las nuevas regulaciones técnicas que formarán parte del Acuerdo de la Concordia previsto y, que debería entrar en vigor en 2021".

No está claro a qué se refería Camilleri por su referencia al trabajo de desarrollo en torno a la revisión planificada para 2021 de la F1, dado que todavía no hay reglamentos técnicos confirmados.

Sin embargo, se ha descrito públicamente un concepto amplio de las reglas del motor, que evoluciona la especificación actual de los híbridos turboalimentados.

Ferrari, Red Bull y Mercedes tienen reservas sobre cómo funcionará la revolución planificada para el 2021 propuesta por Liberty Media, propietario de la F1, en particular con la aplicación práctica de elementos que limitan los costos, como poner un tope de dinero a los gastos de los equipos.

Camilleri ya había suavizado la postura de Ferrari de las amenazas de abandonar la categoría realizadas por su antecesor, el difunto Sergio Marchionne.

La confirmación de que se está preparando un gasto mayor en 2019, con un ojo puesto en los cambios de 2021, deja lejos las posibilidades de dejar la categoría.  

La última derrota obligó a un nuevo planteamiento

El pasado noviembre, el director financiero de Ferrari, Antonio Picca Piccon, dijo que una disminución de 5 millones de euros en costos industriales y de investigación y desarrollo tenía el objetivo "principalmente para reducir el gasto en actividades de Fórmula 1".

Es probable que haya muchos factores detrás de lo contrario para 2019, entre ellos el hecho de que el panorama cambiante de la F1 hace que sea difícil lograr un gasto constante.

En términos de cambios financieros tangibles, Ferrari acredita un aumento de 16 millones de euros en el patrocinio general, los ingresos comerciales y de marca para la compañía en 2018, esto como resultado de haber terminado en el segundo lugar en el campeonato de constructores de 2017.

Ese resultado, que Ferrari sostuvo en 2018, significó que se le otorgó más dinero en premios por parte de la F1 el año pasado, esto tras haber caído al tercer lugar en 2016.

Y aunque la marca italiana no ha recuperado a su tercer cliente de motor que perdió cuando Toro Rosso cambió a Renault en 2017, Ferrari probablemente se ha beneficiado de que Sauber optó por motores del año para 2018.

Ferrari también tendrá un gasto de salario más bajo este año en el departamento de pilotos, dado que Kimi Raikkonen ha sido reemplazado por el joven estrella en ascenso, Charles Leclerc.

Si bien eso presumiblemente le da a Ferrari más flexibilidad sobre la forma en que utiliza sus fondos existentes, el año pasado quedó claro que fue superado por un equipo de Mercedes sin miedo a reaccionar ante el aumento de la presión.

Dado que Camilleri dijo en noviembre pasado que Ferrari está "haciendo todo lo posible para ganar", pero que vio como la sequía de su título se extendió a toda una década, su decisión de agregar aún más poder financiero no resultó sorprendente.

La F1 es vital para Ferrari

También es un estudio de caso sobre cómo Ferrari se mantiene inmune al destino común que se presenta en los fabricantes que tienen períodos largos sin un gran éxito dentro del deporte motor.

Otros fabricantes tienden a alejarse, pero, a pesar de la táctica de negociación pública de Ferrari de amenazar exactamente con eso, se desprende de sus acciones y de la descripción de sus informes financieros que la F1 es demasiado importante para que el fabricante se separe de la categoría de forma seria.

La posición de Ferrari es que su éxito en la F1 y sus gastos "significativos" son dos de los factores influyentes clave en el desempeño general de la empresa.

Si no se gasta adecuadamente, se corre el riesgo de tener resultados más pobres, una menor partida del dinero que se recibe por premios, una mayor dificultad de encontrar un patrocinio nuevo o renovarlo, así como una reducción total del valor de la marca.

El programa de F1 se cita como "el elemento central de nuestro esfuerzo de marketing", lo que significa que Ferrari puede evitar las actividades publicitarias tradicionales y costosas debido a lo que la F1 hace al "prestigio, identidad y atractivo de la marca Ferrari".

Si bien sus altos costos de investigación y desarrollo son "principalmente" los incurridos para su programa de F1, Ferrari también reconoce que son "fundamentales" para el desarrollo de su gama de vehículos de producción.

Pero un período prolongado sin éxitos, tendría un efecto directo y adverso en el negocio.

Es por eso que el compromiso de Ferrari de cientos de millones de euros para la F1 cada año se suma al 2019, en lugar de estar seriamente amenazado durante los años siguientes.