Brawn abrió las puertas del Grupo de Estrategia a todos los equipos

La reunión, que tuvo lugar a finales del mes pasado, fue el último paso en esta nueva era de la F1 en donde los nuevos dueños buscan renovar la categoría y mejorar el manejo de la misma.

Solamente seis de los diez equipos de la parrilla –Mercedes, Ferrari, Red Bull, Williams, McLaren y Force India- asistían previamente a las reuniones, junto con los dueños de los derechos comerciales y la FIA.

Rara vez se compartía con el resto de los equipos cuáles eran los temas discutidos, lo cual significa que quedaban fuera del día a día de aspectos importantes de la F1.

Se cree que hubo un cambio de atmósfera notable en la última reunión, que fue conducida por Brawn, donde se dijo que las discusiones fueron positivas y más enfocadas.

Cuando se llegó a la idea de invitar como observadores a aquellos equipos que no estaban involucrados en el grupo, Brawn lo presentó como un cambio que sucederá en vez de lanzarlo para ser discutido y votado.

Esta movida se cree que es el primer paso para permitir que todos los equipos tengan su voz en la dirección que toma la categoría, pero no necesariamente significa que el grupo se mantendrá como hasta ahora.

Monisha Kaltenborn, directora del equipo Sauber, cree que la movida para permitir observadores "es un gesto", pero no siente que se haya avanzado mucho.

"Al menos sabemos qué es lo que se dice allí", dijo. "En teoría podemos tener la oportunidad de entender por qué llegan ciertas propuestas del grupo".

"Antes no podíamos comprender por qué se tomaban ciertas decisiones. Nadie en verdad podía saberlo".

"Quizás esto nos ayude a tener un mejor entendimiento ya que se podrán escuchar los diferentes puntos de vista".

"Pero no nos sentimos más incluidos porque eso sería poder participar en la discusión. Al final del día, el grupo no puede funcionar de esta manera. No estamos de acuerdo con ningún grupo que tenga este poder de decisión".