Binotto: mala carrera que nos da un golpe en la copa de constructores

El Ferrari SF21, que había hecho las delicias de los aficionados, al menos en la clasificación, en Mónaco y Bakú, dejó a todos atónitos en el circuito Paul Ricard. Carlos Sainz y Charles Leclerc sufrieron durante las 53 vueltas de la carrera y terminaron la prueba francesa fuera de la zona de puntos.

El resultado trajo el recuerdo de los decepcionantes resultados que se vieron a menudo en 2020, con un SF1000 en crisis por falta de potencia, pero con un resultado que hoy pesa especialmente si se mira la clasificación de constructores y el enfrentamiento directo con McLaren por la tercera posición.

El equipo de Woking brilló con Lando Norris, que fue quinto hoy, y con un redescubierto Daniel Ricciardo que cruzó la meta detrás de su compañero de equipo. Los puntos obtenidos por el inglés y el australiano permitieron a McLaren volver a superar a Ferrari en la clasificación y ahora ocupa la tercera plaza con 110 puntos frente a los 94 de la Scuderia.

Al final de un GP absolutamente desastroso, Mattia Binotto, entrevistado por los micrófonos de Sky Sport F1 Italia, no ocultó la decepción por una actuación inesperada.

"No hemos ido mal sólo en comparación con Barcelona, sino también en comparación con todas las demás carreras ya disputadas y también con el ritmo visto el viernes. Fue una mala carrera para nosotros, sin duda. Terminamos fuera de los puntos y si miramos la clasificación de constructores podemos decir que fue una paliza”.

Lo que sorprendió al director del equipo Ferrari fue el excesivo graining que se manifestó en la carrera y que complicó la vida a sus pilotos.

"Algo no funcionaba, teníamos mucho graining y no lo esperábamos. Tendremos que analizar todos los datos, pero la hipótesis para este rendimiento está ligado al sobrecalentamiento de los neumáticos”.

Charles Leclerc, Ferrari SF21, Antonio Giovinazzi, Alfa Romeo Racing C41

Photo by: Drew Gibson / Motorsport Images

Sin embargo, que el SF21 entre en crisis con las altas temperaturas no es nada nuevo. De hecho, ya durante los entrenamientos de pretemporada en Bahréin, analizando los tiempos de carrera, se pudo comprobar que el monoplaza del Cavallino no era amable con las gomas.

Binotto admitió que este defecto ya se había detectado desde la temporada pasada y que, con toda probabilidad, habrá otras carreras en las que la SF21 volverá a sufrir como hoy.

"Analizar y comprender es el primer paso para luego corregir los defectos. Sabemos que este año, con las altas temperaturas lo estamos pasando mal. Es uno de los problemas que arrastramos del año pasado sobre el que no pudimos trabajar y sobre el que no podremos intervenir".

"Habrá otros circuitos en los que tendremos problemas por la temperatura del asfalto. No en todas las pistas encontraremos estas condiciones y los abordaremos de uno en uno, pero primero tenemos que tratar de entender lo que ha pasado hoy e intentar corregir, si podemos, los problemas”.

El director del Cavallino señaló que los cambios de presiones impuestos por Pirelli para esta carrera también trajeron efectos.

"Hubo un aumento de la presión por parte de Pirelli en los neumáticos traseros. Esto provocó un mayor deslizamiento y la formación de granulado. Sin embargo, tuvimos más problemas en la parte delantera que en la trasera".